Cuando una marca asegura
que sus productos son cien por ciento naturales o que tienen cierto ingrediente
que los hace especial debe estar segura de que sus consumidores le creerán y si
descubren que no es cierto estarán en graves problemas y para muestra de ello
es el caso de Kit
Kat, esta marca de chocolates que enfrenta una demanda por
engañar a sus
consumidores.
Saima Ahmed, una
estudiante londinense ha puesto en jaque a la marca propiedad de Nestlé ya
que decidió entablar una demanda contra la compañía por engañarla ya que los chocolates
que compró no contenían la típica galleta que se supone deben tener.
Previo a su
queja, la joven investigó en internet si había más quejas
similares encontrando varias por lo que exigió a la marca un
suministro de por vida de sus chocolates ya que así ella podría
asegurarse de que siempre tengan la galleta y no le mienta a sus
consumidores.
“Nestlé tiene
un gran número de seguidores y no creo que estos errores sean
aceptables. Deben definitivamente ceder. Estoy esperando que mi demanda vaya
más alto que sólo llegar a servicio al cliente”, detalla Admeh en
su querella.
De acuerdo con
Statista, Kit Kat fue
la tercera marca de
dulces que más ventas tuvo en el 2015, pues sus ventas ascendieron
a 140.4 millones de dólares (mdd), sólo por debajo de Snickers con
164.7 mdd y Reese´s con
174 millones de dólares.